EL PROYECTO ‘HABLEMOS DEL CAMINO REAL DE TIERRA ADENTRO’ y la experiencia en los municipios de Meoqui y Rosales en 2015
Artículo de divulgación
Por Alicia de los Ríos Merino / Historiadora
A principios del siglo XVI, los conquistadores españoles iniciaron la construcción de una ruta que comunicara la capital de la Nueva España – hoy Ciudad de México – hacia el norte, concluyendo en Santa Fe, Nuevo México. Este camino es considerado real debido a su carácter hispano, es decir, fue trazado, construido y utilizado en los tres siglos de colonia española. Sin embargo, al ser incorporadas rutas previamente construidas por los pueblos originarios, no podemos obviar los procesos históricos previos denominados prehispánicos –antes de la presencia española – así como los posteriores a la independencia de nuestro país del siglo XIX.
El Camino Real de Tierra Adentro (CRTA) fue la principal ruta que transitaron hombres y mujeres, llevando consigo la explotación de minerales, la colonización de territorios y la evangelización. A lo largo del Camino surgieron poblaciones cuyos habitantes construyeron patrimonio monumental y cultural, tangible e intangible. Por ello el INAH desde 1994 proyectó su reconocimiento por la UNESCO como patrimonio de la humanidad. La declaración como itinerario cultural se obtuvo en el 2010, sin embargo el reconocimiento en nuestro estado comprende únicamente hasta Valle de Allende, Chihuahua. Como Centro INAH Chihuahua creemos que nuestra tarea es continuar descifrando, registrando y divulgando la vida, historia, cultura y patrimonio de las poblaciones fundadas alrededor de esa gran ruta.
Por ello emprendimos el proyecto Hablemos del Camino Real de Tierra Adentro, con la intención de acudir a diversas comunidades en el tramo comprendido en nuestra entidad, reunirnos con sus habitantes para dialogar, recolectar y divulgar sus leyendas, tradiciones, saberes, conocimientos, preocupaciones de ayer y de hoy. Pensamos que ello permitirá comprender las maneras particulares en que nuestra entidad se ha forjado desde hace más de trescientos años, aquello que hemos sido, lo que somos y lo que soñamos ser. Pretendemos relacionar el CRTA con la suma de experiencias protagonizadas por hombres y mujeres de carne y hueso, experiencias que junto a las de otros conforman memorias colectivas que nos cohesionan como pueblos y nos distinguen de otros.
Desde mediados del 2015, un equipo interdisciplinario del INAH acudió a Rosales y Meoqui encontrando eco con diversos ciudadanos y autoridades preocupados por su patrimonio cultural. Los días 10 y 11 de diciembre de ese mismo año, se presentaron los hallazgos y productos finales en eventos públicos, en medio de un ambiente festivo y de compromiso con las comunidades. Hoy nos parece pertinente y necesario divulgar las investigaciones realizadas alrededor de diversos ejes temáticos: antropología, monumentos históricos –patrimonio edificado, bienes muebles y fotografía histórica–, arqueología, historiografíay estudios medioambientales. Esperamos que sean útiles para los lectores.
La recopilación fotográfica ‘Meoqui y Rosales a través del tiempo’
En el marco del encuentro Hablemos del Camino Real de Tierra Adentro, se realizaron dos exposiciones de fotografías antiguas bajo el nombre: ‘Meoqui y Rosales a través del tiempo’, muestra derivada de la recopilación del material gráfico que se obtuvo a través de una convocatoria en la que participaron los habitantes de ambas comunidades.
Las exhibiciones se lograron gracias al interés de la gente de Rosales Meoqui, quienes se dieron a la tarea de buscar entre sus archivos personales y compartir con la comunidad las fotografías antiguas guardadas de generación en generación en los álbumes y recuerdos familiares.
Además de involucrar a la gente y hacerlos partícipes de sus procesos históricos, este proyecto es una puerta para que cada municipio cuente con su archivo histórico de fotografías. Por ello se explicó el proceso de estabilización, recuperación, restauración y digitalización que se realiza en la Fototeca del Centro INAH Chihuahua para conformar este tipo de acervos.
A través del proceso de escaneo de las fotografías se logró recopilar un importante archivo histórico, el cual fue donado por parte del INAH a las autoridades municipales de ambas comunidades, y que podrá ser utilizado con fines culturales y de divulgación.
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